¿Qué nos pasa en Navidad?
Cambiamos los hábitos, por reuniones familiares o vacaciones.
- Los horarios cambian porque no hay trabajo. Comemos menos veces pero más cantidad.
- La alegría de la gente se manifiesta ofreciendo comida, bebida y regalos.
- Los alimentos se elaboran mucho, se condimentan más y se utilizan ingredientes más calóricos y se combinan grasas con proteínas, generalmente sin verduras. Lo que convierte las comidas en indigestas y muy calóricas. Además se suele aumentar el consumo de alcohol y azúcar. Ambas sustancias totalmente vacías y con un alto contenido energético.
¿Podemos convertir la navidad en unos días favorables?
Sí, siguiendo algunas pautas de conducta y de alimentación viviremos de manera equilibrada la navidad. No descuidando lo más importante: cuidarnos a nosotros mismos.
- Realmente hay 5 festivos dentro de 31 días que tiene el mes diciembre. Si cometemos un «exceso» un día, a la mañana siguiente volvemos a empezar. Evita caer en la trampa de: total es fiesta, no voy a «sacrificarme» ahora.
En el fondo lo que nuestro cuerpo quiere es que disfrutes, eres tú la que debes enseñarle a que puedes disfrutar de otra manera. Sustituyendo el chocolate con melindros por un delicioso te y una onza de chocolate.
- Planifica el menú: procura que los primeros sean siempre vegetales. Y los segundos alimentos proteicos. Evita las salsas calóricas. O disminuye la cantidad. Recuerda desayunar bien, incluyendo fibra, grasas y proteínas de calidad. Sigue comiendo fruta a media mañana. No cambies demasiado tus horarios.
- Elige de postre fruta y espérate unos minutos hasta tomar el dulce. Bébelo con te. Si puedes antes del dulce, camina unos minutos.
- Intenta que la bebida principal sea el agua. Toma una copa de vino o cerveza. Evita los licores, si la comida se alarga. Puedes proponer ir toda la familia a dar un paseo o si no te levantas con cualquier excusa y te evades unos minutos. Cierra los ojos, respira y siente lo bien que estás actuando
- Evitar las tentaciones externas. Es decir si estamos con un menú para perder peso, procura no pasar cerca de pastelerías, lugares donde se preparare comida rápida. Pasea mejor por sitios abiertos, donde haya arboles y mira la naturaleza. Si por cualquier cosa tienes que ir de compras y encuentras tentaciones. Párate un momento, respira y recuerda que puedes hacer las cosas de otro modo.
- Prepárate antes de las comidas familiares. Cierra los ojos e imagínate allí. Con tu ropa nueva, buena compañía y un ambiente agradable.
Mira cómo ponen los platos en la mesa y tú eliges los mejores para ti. Sintiéndote bien
- No renuncies al bienestar que nos aporta la actividad física. Si no vamos al gimnasio salimos a correr, o a caminar. Hacer actividades en grupo o familia. Por ejemplo ir a la montaña, aprovechar los días de fiesta para visitar pueblos y ciudades. Deja el coche lejos, y caminar en familia. Así los días son agradables y están llenos de experiencias bonitas.
Cuídate estas navidades y siempre,
