Actitudes más comunes cuando hay una herida en nuestra autoestima y cómo cambiarla.
Si identificas una de estas actitudes en ti deberemos ir reduciendo la carga que tienen en nuestra vida para poder sanar y recuperar nuestra autoestima porque mantenerlas y seguir nuestra vida con estas actitudes no hacen más que seguir dañando nuestra autoestima. Por lo tanto, una vez la identifiquemos empecemos a poner toda nuestra intención para soltarla. ¿Cómo? Te dejaré preguntas que puedes hacerte para salir de esta actitud y algunos ejercicios o tips que te serán muy útiles.
ACTITUD DE VÍCTIMA: tiene una actitud negativa ante la vida, piensa que todos los desastres le acontecen a él/ella. Es la persona que, le ocurra lo que le ocurra, enfoca su atención en lo negativo de las situaciones, y se lamenta por su mala suerte. Tiene un sentimiento de “pobre de mi” y cree que nadie le quiere, se predestina a la fatalidad. Tiene envidia de las personas a las que le van bien las cosas. Sus creencias son “no merezco”, “todo lo hago mal”, “no valgo lo suficiente” y “no hay suficiente para mi”.
Preguntas para salir de la ACTITUD DE VICTIMA:
¿qué cosas te gustan de ti y de tus circunstancias?
¿qué cosas has hecho bien o con éxito últimamente?
¿qué personas te quieren o aceptan totalmente?
Ejercicios:
Toma responsabilidad. Empodera tu lado de adulto/a.
Escribe al final del día lo bueno o positivo que te ha ocurrido.
Deja de poner escusas, y de repetirte pobre de mi u otras creencias que sólo te anclan en este estado.
Empieza a creer en ti y en tus posibilidades! Sólo de esta manera serán posibles!
ACTITUD DE ANTICIPAR FRACASOS: hace predicciones fatales sobre el futuro, ante cualquier situación de la vida anticipa todo lo negativo que le puede ocurrir en función a las experiencias de fracaso que ha vivido en el pasado. Creencia: “voy a anticipar las desgracias, así si ocurren ya estaré preparado/a”. No se da cuenta de que con este pensamiento lo que está haciendo es vivir en la desgracia continua y crea un camino hacia el fracaso y la inacción. Tiene el sentimiento de fracaso y de impotencia, porque nunca le salen las cosas como ella cree que tiene que ser. Creencias típicas: “a mi no me puede salir bien” y le falta confianza.
Preguntas para salir de la ACTITUD DE ANTICIPAR FRACASOS:
¿cómo podrías manejar la situación si las cosas no ocurrieran exactamente como tú deseas?
¿qué recursos tienes?
¿qué puedes hacer para estar preparado/a para manejar situaciones nuevas?
¿en qué te ayuda la preocupación?
Ejercicios:
Vuelve al presente. Hacer ejercicios de mindfulness, meditación o respiración te ayudarán.
Pon freno al “y si….y si… y si…” y piensa en el ahora: “lo que ahora se… lo que ahora puedo hacer…”
Sólo dedica un ratito al día para pensar en el futuro y lo que pueda ocurrir para entrenar tu mente a hacerlo sólo cuando quieras pensar en ello. Esto te dará control.
Date la oportunidad que esta vez sea distinto y contempla esta posibilidad: “si puedo, esta vez será distinto”.
Piensa en otras opciones que pueden ocurrir para ampliar tu pensamiento.
Valora cuantas veces has pensado en lo peor y en realidad cuantas veces ha ocurrido.
ACTITUD PERFECCIONISTA: Es una juez de sí misma. No se acepta y no acepta sus acciones ni sus errores. Siempre se compara con aquellos que cree mejores, y así siente que no llega a dar la talla. Tiene una idea muy clara de lo que debe ser y lucha por conseguirlo a cualquier precio o bien se siente tan cansada de esforzarse que se deprime y abandona. Se siente muy insegura y se esfuerza por ocultar su inseguridad y sus debilidades. Tiene un fuerte sentimiento de culpa constante. Hace juicios negativos de ella misma y de los demás. Creencias: “si soy perfecta me van a querer” y “si me quieren seré feliz”.
Preguntas para salir de la ACTITUD PERFECCIONISTA
¿qué cosas has hecho bien que te hacen sentir bien contigo?
¿qué buenas razones tuviste para hacer lo que hiciste?
¿qué puedes hacer para aprender de la situación?
Ejercicios:
Valora tus rasgos y cualidades positivas sin minimizarlos.
Permítete fallar y busca lo bueno del fallo. Porque lo tiene!
Separa tus errores de tu valía o valor personal.
Reduce esas condenas o críticas tan duras que te haces a ti mismo/a y suavizalos para que te ayuden a lograr mejor tus objetivos.
ACTITUD INDECISA: Es la persona con una actitud de duda permanente. Esta actitud tiene características de las otras tres: es perfeccionista, se siente víctima (porque las cosas no son como ella quiere) y anticipa fracasos (y por tanto ocurren). Ante este lio mental lo que hace es dar vueltas sobre sus decisiones sin llevarlas a término, con lo cual su vida se bloquea. Este bloqueo genera confusión, frustración y miedo a concretar cualquier acción. Nada le satisface. Se juzga y es tolerante con las acciones de los demás. Tiene miedo a equivocarse y se lía mucho en sus pensamientos. Creencias: “si hago una cosa pierdo otra” “necesito la seguridad que no me voy a equivocar”.
Preguntas para salir de la ACTITUD INDECIDA:
¿me compensa tanta indecisión? ¿A dónde me lleva?
¿te das cuenta que esta actitud te mantiene en tu miedo de no lograr o conseguir lo que te propones?
¿ves que de esta manera será muy difícil que lo consigas?
¿cómo te lo puedes poner más fácil?
*Las preguntas de las otras actitudes también te servirán.
Ejercicios:
Decide una cosa y ve a por ella, si te vuelve la duda recuerda que ya lo has decidido! Puedes empezar con pequeñas cosas del día a día.
Prueba y aprende pero instalado/a en la duda no podrás aprender ni tomar mejores decisiones.
Asume que no podemos tener todo y elige lo que más te conviene con sus pros y contras.
Frena el “y si…y si…y si…” también te mantiene en la duda. Puedes probar con “y si la elección que hago no es buena encontraré la solución, ahora lo más probable es que la elección que haga será buena para mi”
Hacer ejercicios de mindfulness, meditación y respiración también te ayudarán a conectar con tu claridad mental y disipar las dudas que te atormentan.
Deseo que puedas poner en práctica un cuidado a tu autoestima y no dañarla con actitudes que puedes haber aprendido y ahora puedes dejar ir,
